La verdad es reiterativo, repetitivo, pero necesario reflexionar una vez más sobre el tema después de la pasividad y el comportamiento timorato de los mexicanos en su gran mayoría, que entre la crisis actual con el gasolinazo que nos arremetieron y los que le siguen, no se sabe quién diablos les ha metido a tanta gente en la cabeza que anda muy desorientada, que el problema del país es el incremento a los combustibles, ya que en mi humilde opinión, es el menor. Tal parece que para empantanar la verdad, han dejado que la errónea creencia siga permeando en la mente de los mexicanos, como un gran distractor del fondo del asunto, lo que resulta muy conveniente para la reticencia que ha demostrado el actual gobierno mexicano en todos sus niveles, con el fin de emprender un real y creíble combate al desmesurado robo del recurso público.
Es tan grande el tejido de la corrupción existente que es difícil, el actual gobierno de la república pueda emprender la lucha frontal. ¿Y por qué insisto tanto en el tema?. No es que no exista algo más de que hablar, es que es

urgentísimo frenar el saqueo del recurso público, pues es lo que tiene en terapia intensiva las finanzas gubernamentales. Cada día que pasa vemos cómo en la clase política actual hablando de dinero fácil, el más chimuelo masca tuercas. Y es que la liebre salta de donde menos se le espera. Hay conocidos defraudadores de recursos públicos como el muy famosísimo tiburón de la zona media, el diputado local Óscar Bautista Villegas, quien no cesa de manipulaciones para conseguir recursos a sus constructoras manejadas por sus muy famosos prestanombres Jhon Henry Vega, su sobrino consentido y Eduardo Martínez Gutiérrez, que entran y concursan obras y terminan siendo asignados ocupen el lugar que ocupen, por mandato de la divinidad política.

Actuán no sólo en el preferido municipio de Ciudad del Maíz, también se metieron a San Ciro y ahora en Rioverde, en la terminación de la obra del puente ferrocarrilero, donde quedó el sobrino en el tercer lugar y por obra y gracia de la trinidad brincó al primero para ejecutar los trabajos. ¿Y cuál es el problema?, que por lógica, ante un presupuesto asignado, determinado, queda claro que las cantidades que se distribuyen para los moches saldrán de la misma obra presupuestada y tendrán por consecuencia lógica un detrimento en la calidad de los materiales. Lo que puede ocurrir como lo registrado en el puente Cascabel en Valles, que representa un digno monumento a la corrupción y sobre todo a la impunidad. Y chimuelo también salió el gobernador Juan Manuel Carreras que a unos meses de su mandato, ya le comenzaron a salir sus linduras como es el caso de los terrenos donde se habría de instalar la empresa Ford y que ahora ante su retirada afloró un bisnecillo de gente muy ligada a su entorno, lo que representó el desembolso de algunos 500 milloncejos, lo cual queda claro, que gratis no fue.

Debió ser muy grande el dolor del doctor en derecho. Seguro ya había proyectado algunos cuantos negocitos más relacionados con la misma firma. Tal parece que el combate a la corrupción es solo un anhelo para los mexicanos y todo lo que represente un ingreso para el gobierno no llegará pues tendría que cesar primero la ambición desmedida, la impunidad que representa el lado más oscuro y doloroso de la corrupción mexicana. Insisto, se han mal direccionado las protestas sociales por el alza de los combustibles, porque resulta casi imposible que el gobierno mexicano se retracte de tal medida y por otro lado la única forma de sanear las finanzas públicas es detener el desmesurado saqueo que realizan los actores políticos.

Sin embargo existe la fe en que la sociedad vea y entienda lo que debe exigir es el cese de los saqueos y una limpia de lo más posible en el servicio público, con representantes populares hasta ejecutivos del gobierno. Pero tendría que ocurrir un milagro. No obstante, es momento para tener fe e imaginar que lo mejor está por venir. Entre tanto seguiremos insistiendo en la necesidad de detener el saqueo de los recursos económicos de todos los mexicanos. En un mundo globalizado, alguien con poder suficiente nos puede escuchar, saludos y bendiciones a todos. “La paciencia es un árbol de raíz amarga, pero de frutos muy dulces». Popular.

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