Al repartir despensas, Gallardo ataca la volátil “maldita herencia”, pero también exalta a su cónyuge, Ruth González, la “madrina”, para que lo releve

14 octubre, 202411:00 pmAutor: Oralia Guzmán MendozaCapital Municipios Noticias

Al poner en marcha el programa de reparto de despensas en la colonia Nuevo Progreso de la capital, el gobernador Ricardo Gallardo aprovechó para iniciar una abierta campaña a favor de su esposa, la senadora Ruth González, que busca lo releve en el cargo. Aseguró que en el 2027, va a enterrar a la “maldita herencia”. Se quejó de sus detractores. Siempre que hace alguna obra o entrega apoyos en beneficio a la ciudadanía, lo critican y culpan “si un perro se caga en la esquina o cae un rayo”.

Les recordó a los asistentes que la “madrina”, en referencia a la cónyuge, caminó en la zona y les platicó que iba a cambiar el costalito de la despensa por otro más grande. El objetivo es que, “con la beca alimentaria a las mujeres, les quede dinero del chivo que les da el marido, para gastarlo en arreglarse las uñas, pintarse el cabello o ir a la estética a ponerse pestañas”. Luego preguntó: “¿les gusta el cambio de la madrina”. Dijo que más de medio millón de cajas, se entregarán cada 40 días a las puertas de los domicilios. Les pidió inscribir a más personas al programa.  Insistió. “Para que laos beneficios pudieran llegar a ustedes, hizo una labor titánica la madrina, en armarla, conseguirla y trabajarla”.

Les prometió que en mes y medio, regresará para arreglar edificios y casas, pintarlas, ponerles tinacos, cambiar tuberías y bombas de agua eléctricas, como lo hizo en Pavón, donde también les construyó canchas de juegos. “Ahora, gracias a los cambios, ya no son condominios, se llaman los depas de Pavón”.

Aprovechó la entrega de las despensas que pomposo denomina “programa de seguridad alimentaria”. Se quejó de los adversarios políticos, a los que alude todo el tiempo con el mismo estribillo. Arremetió una vez más contra el edil de San Luis, Enrique Galindo Ceballos, al que no menciona por su nombre. Pero la indirecta es obvia. “Cada vez que tengo un acto grande y bonito, la gente se entrega. Si una familia recibe apoyos, como en días recientes, al entregar a los niños mochilas y zapatos, la maldita herencia, nos empieza chingue y chingue, en las redes sociales. En todos lados habla mal del gobierno. Si cae un rayo, el pollo tienen la culpa. Lo ponen en las páginas. Cayó un rayo, es por mi culpa. Mañana empezarán a chingar. No pueden ver que ahora se ayude a la gente. Durante 30 años nunca hicieron nada por el pueblo. Se robaron todo el dinero durante 30 años. Nunca hicieron un puente, carretera o escuela”.

Y luego aludió a Galindo “En las pasadas elecciones, muchos volvieron a votar por la maldita herencia, a pesar de que las colonias ni agua tienen. Es más, ahora la gente abre hasta los tinacos para que les caiga agua, porque es más fácil hoy, que el cielo se las facilite que el Interapas. Pero el recibo llega puntualito, pagan o se las cortan. Son cabrones. Los vamos a acabar en el 2027, se irá el Interapas”.

Añadió. “Cada que se entrega una despensa, un paquete de útiles escolares, pintamos edificios, hacemos una calle, carretera, puente o venía un artista a la Feria Nacional Potosina, la maldita herencia empezaba a chingar. Pasaba un perro, se cagaba en la esquina y rápido decían, en todos sus portales patitos, se cagó el perro en la esquina por culpa del pollo. Imagínense, yo decía, qué bueno soy. Todo lo que pasa es culpa mía, ya parece que soy el chamuco. Si, pero de la maldita herencia”.

Luego les dijo que en su periodo, se han construido 180 escuelas nuevas, en la huasteca y altiplano, 45 carreteras, cuando en 40 años no hicieron ninguna. Cuatro puentes y vamos por otros 4 más, que no se hicieron en 18 años. Y otros 70 que no le ayudaban al pueblo, hasta que llegó mi gobierno. Hemos hecho más en 3 años, que en los 30. Ahora están enojados porque llegó alguien a enseñarles cómo se gobierna y se ayuda al pueblo.

Dijo no importarle las críticas, porque tiene al pueblo que lo defiende y ayuda. “No nos importa lo que diga la maldita herencia, sólo lo que opinen las familias en sus casas. Si nos envían una oración, resistimos los ataques en sus portales y medios. Antes les pagaban millones, porque tal gente nunca habló mal de los otros que si robaron. Antes no dijeron todo lo que se llevó Carreras, Toranzo y Marcelo de los Santos, el cabecita de algodón. No dijeron lo que se cargó Horacio Sánchez y su gente. Nadie decía nada, porque recibían millones de pesos por hablar a favor y el pueblo que se chingue”.

“Eran 10 ó 15 los que se llevaban todo el presupuesto de San Luis en negocios. Las colonias olvidadas, sin apoyos, escuelas y caminos jodidos. Pero los gobernantes, bien peinado en el palacio, con aire acondicionado, se dedicaban a hacer llamadas. Cuando chingados se habían venido a meter a la Progreso, Salk, Tierra Blanca, Pozos, a Prados, Praderas, nunca. Menos a las comunidades de la huasteca, que están a 50 grados. Es donde camina el Pollo. Los demás mandaban en palacio, vivían como reyes. Su gente los encomiaba. Es la maldita herencia, la que ya acabamos. En el 2027, los vamos enterrar. ¿Están de acuerdo?”. Sus ahijados asintieron con desgano, entre murmullos. 

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