
Omar Velázquez expone la fórmula para echar fuera de la alcaldía de Soledad a los Gallardo
18 marzo, 20199:17 pmAutor: Paola Moreno GuzmánCapital Destacada Municipios Noticias
Después de 25 años de no ganar la alcaldía de Soledad, ahora, con el respaldo del dirigente estatal del PRI, Elías Pecina Rodríguez, se puede crear una estructura sólida para volver a la senda del triunfo. Hay dos años y medio por delante para hacer una campaña constante y buscar todos los votos posibles, dice entusiasmado el ex presidente del comité municipal, Omar Velázquez Nava. “Antes, cuando se elegía a un candidato, se cobijaba con toda la estructura del partido. El abanderado se dedicaba solo a convencer a la gente. Ya no lo hacemos porque cuesta dinero y trabajo. Debemos partir de que no tenemos nada. Empezar de cero, renovarnos, convivir con los seccionales. Conocer sus necesidades y sepan que de verdad estamos juntos, no solo cuando nos conviene. Hay que hacer promoción y activismo político”.
Aludió a los ex ediles perredistas, Ricardo Gallardo Juárez y Ricardo Gallardo Cardona, que supieron armar un sistema de coordinadores de calle, colonias, secciones, casillas, zonas urbanas y rurales. “Nosotros ya no los tenemos. Ahora con la entrada de Elías Pecina, las esperanzas de un futuro mejor para el PRI son mayores, ya que es un hombre con gran experiencia. Antes fue presidente del comité municipal de la capital. Sabe las necesidades de la gente. Es sencillo y carismático. Trae la idea de regresar a las bases del PRI. Los jóvenes no saben todo lo que el partido era años atrás. Los Gallardo aprovecharon lo que habíamos construido pero que abandonamos. Agarraron las banderas del PRI. Con Pecina podemos retomar el rumbo. En el caso de Soledad, trabajar y dejar todo en manos de la gente que es originaria del municipio. No en foráneos, porque todo se viene abajo”.
Velázquez subrayó que los Gallardo están muy desgastados después de 12 años de controlar el ayuntamiento. “La ciudadanía está cansada de recibir dádivas que no cubren las necesidades de seguridad, bacheo o educativas. Las grandes votaciones que obtenía el PRD ya no son las mismas. La gente se cansó de mentiras y limosnas. Compraron y coaccionaron muchos votos. Hay que sumar los sufragios duros que les robó el presidente Andrés Manuel López Obrador, porque Morena no tiene una fuerte estructura nacional. El edil Gilberto Hernández Villafuerte gobierna solo con el 30% de la votación efectiva. Es decir, el resto de los pobladores no lo apoyó o no salieron a sufragar. Es la ciudadanía que debemos buscar. Acercarles una propuesta real. No sabemos dónde está determinada colonia, seccional o liderazgo. Es el error que mi partido cometió cuando se vienen las candidaturas. Las decisiones las toman de manera cupular”.
Aludió a la ex abanderada del PRI a la alcaldía, Margarita Hernández Fiscal, que hizo su mayor esfuerzo, pero no tiene arraigo en Soledad. “La dirigencia inventa candidaturas que no funcionan. Se necesita gente que de verdad sea de del municipio. La ayuda es bienvenida con los trabajos del partido. No queremos protagonistas. En largos 25 años no se ha tenido un cuadro nuevo y sólido que la dirigencia estatal haya apoyado para lograr la presidencia municipal. Está el caso de mi prima, Amalia Velázquez. Fue muy fortuito, no hubo trabajo de partido. Con Carmelo Olvera pasó lo mismo. Se inventó el candidato. No tuvo la culpa, son los priistas que no saben trabajar con tiempo. Además ha habido muchas traiciones dentro del partido. Se necesita una ardua labor para tener futuro. Cuando Gallardo Juárez perdió contra el panista Juan Manuel Velázquez, al día siguiente salió a tocar puerta tras puerta. Tiempo después ganó. Su campaña mediática la realizó en contra de las familias predominantes en el municipio y de los partidos que en su momento dominaban. El futuro del PRI es hacer un proyecto similar, un análisis, llegarle a la gente para que vuelva a confiar”.
Respecto a las versiones de que los Gallardo ayudaron al PRI a ganar la gubernatura a Juan Manuel Carreras, Velázquez argumentó que es un tema complicado. “La flojera de los anteriores dirigentes del partido fue lo que en realidad llevó al PRI al declive. Además de hacer política sin ponerle un solo centavo. Soledad es de los municipios con más del 60% del padrón electoral en el estado. Dejar los destinos de la campaña solo al triunfo de la gubernatura es un círculo vicioso. Cuando fui presidente del partido, no me permitieron hacer seccionales y no me apoyaron con nada. Ni Fernando Pérez Espinosa, ni Joel Ramírez ni Martín Juárez. ¿Cómo pretenden hacer política sin dinero?. La política siempre la he entendido como un tema de percepción, de mercado. Se necesita que alguien traiga al menos para invitar un café. Fue como instituyeron la política los Gallardos en Soledad. La presidencia cuesta, bajita la mano, 10 millones de pesos. Es la campaña como pre candidato, luego candidato, después las elecciones. El que no tenga mejor que ni le entre. No hablo de comprar votos. Una estrategia publicitaria incluye pago de redes sociales, carteles, es muy caro. Los preparativos son dos años y medio antes de las elecciones, que se deben ganar en las urnas. Si un candidato hace lo correcto desde el principio, no tiene que impugnar en los tribunales”.
Otro de los grandes errores que han causado la debacle del PRI es la obsesión por ganar las principales regidurías. Los políticos buscan obtenerlas para seguir dentro de cualquier órgano del partido. Sin embargo, Velázquez considera que deben otorgarse a la clase política que trabaje. No como un método de chantaje para que los apoyen ciertos grupos o liderazgos. “Con estructura y proyecto el partido podrá lograr posicionarse en el 2020. Las regidurías serán lo de menos. No hay que dejar los pesos por los centavos. Inclusive se lo he dicho a mi hermana que es regidora, o trabaja o se va. Hay que empezar la campaña desde hoy. En la campaña anterior lanzaron a una candidata que ni su nombre recuerdo. Era de Nueva de Alianza. Los resultados fueron desastrosos. Todo porque no se analiza cada uno de los aspectos ni los perfiles adecuados para ocupar los cargos. Las cifras del PRI en Soledad han sido muy controvertidas. La primera vez que compitió Amalia Velázquez, sacó alrededor de 28 mil votos. La segunda cerca de 31 mil. Cuando Carmelo Olvera se lanzó obtuvo 9 mil votos. Margarita Hernández logró apenas 16 mil, ni si quiera la mitad de lo que logró Velázquez. Lo que nos habla de que se ha pulverizado el voto del partido. No saben dónde está o cómo identificarlo. Hace falta salir a buscarlos. Todos tenemos en nuestro ADN un priista adentro. Lo fueron en su momento. Era una política de castas, de familias, todo funcionaba normal, hasta que perdimos el rumbo y otros lo agarraron. En el partido solo tenemos a una regidora. Si hubiéramos impugnado, alcanzamos dos”.
Velázquez consideró que el PRI debe comenzar a trabajar de manera particular, sin ningún tipo de alianza o coalición que implican pérdidas y más trabajo. O analizar cuáles convienen en realidad. Además, adecuarse a las nuevas formas de hacer política. “Si fuéramos en alianza, cada partido debe adquirir la votación efectiva para tener su regidor y fregarle en la campaña. Como coalición, existe una transferencia de votos, por lo que los partidos chicos dejan de trabajar, pues ya cuentan con algo asegurado. El partido grande se esfuerza al doble. No digo que no los necesitemos, pero debemos saber quienes son los indicados. Se perdió la base y esencia de un partido revolucionario e institucional para convertirse en un ente fresa y banal, de clase media-alta. Antes se atendía a la clase social baja. Los jóvenes no reflejan la realidad de la gente del PRI, de la sociedad potosina, andan en los lugares más caros de San Luis y México”.
“Se perdió la brújula. Hay que dejar los complejos de grandeza. El partido es del pueblo. Cuando fui dirigente del Frente Juvenil, recuerdo que tomó protesta conmigo Alejandro Polanco. Uno en Soledad, el otro en la capital. Nos presentamos en un auditorio, que se dividió en dos. La gente que llevó era de clase media, vestidos de manera elegante. Los míos eran puros pandilleros. Al final hicimos una comida. A mis seguidores no los querían dejar entrar. Se nos ocurrió hacer un experimento. Cada quien trajo uno de sus simpatizantes al azar. Les dijimos que sacaran sus credenciales de elector. El de Polanco no la traía. Mi compañero la cargó hasta enmicada. Lo que aprendí es que no se debe hacer diferencias ni agarrar banderas. Pero si elegir con cuidado al equipo. Gallardo Cardona se dice del pueblo y la gente lo quiere porque los ayuda y es humilde. Es mentira. Si lo fuera, no se cambia a vivir a una de las zonas más privilegiadas de la capital y tener carros que valen millones de pesos. No demuestra la realidad de cómo vive la gente de Soledad”.
Omar Velázquez señaló que su partido tiene todo el 2019 para crear una estructura primaria. Y de enero a diciembre del 2020 formar los 58 seccionales. Siempre con el objetivo de ganar la presidencia municipal de Soledad. Aunque cuenten con el apoyo del gobernador Juan Manuel Carreras, no es garantía que la gente vuelva a confiar en el PRI. “Todas las elecciones son diferentes. Necesitamos arriba de 50 mil votos. Se requiere un gran trabajo electoral. No confrontarse con los Gallardo. Hacer propuestas y que la ciudadanía nos de la oportunidad de gobernar. Después de 25 años, tenemos una manera muy distinta de actuar. Nos motiva el hartazgo de tanta corrupción de los anteriores alcaldes. Somos el cambio que buscan. No me iré a ningún lado más. Mi corazón al igual que el de mi familia está con el partido. Se me han presentado varias oportunidades, pero las he rechazado. Me moriré en el PRI”.